La economía informal en Mexicali representó el 34% al término del 2023 en comparación con el empleo formal el cual ronda en el 66%, manifestó Rubén Apodaca Caro, miembro de la Comisión Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de Mexicali. Mencionó que esta información se desprende de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Y agregó que dicha cifra está por encima del 15 a 20% que presentan otras ciudades fronterizas del norte como son Monterrey, Ciudad Juárez y Reynosa.
Refirió que el alto porcentaje de informales no sólo se deriva de la condición de las dificultades que tienen muchos para colocarse en una empresa, sino también a la voluntad de algunos por emprender una actividad independiente. Y a ello hay que agregar, el hecho de que algunas empresas no registran a sus trabajadores en el Seguro Social, no están dadas de alta en el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y no utilizan servicios bancarios. Señaló también, que la informalidad ha crecido debido a que, para muchos, el trabajar por cuenta propia representa mejor costo-beneficio, comparado con lo que reciben en un trabajo formal.
Trabajar en la formalidad no sólo requiere cumplir la jornada laboral, sino también invertir tiempo en los traslados hacia y desde los centros de trabajo. A esto, agregó: Hay muchas implicaciones desde las distancias de trabajo, las cosas que se dejan de hacer, con hijos, familia, los costos que se tienen que invertir para llegar al centro de trabajo, con todos esos puntos ya no se sabe si las empresas son las informales o los trabajadores”.
El contador Apodaca expuso que a nivel nacional el 54.5% de los trabajadores se encuentran en la informalidad lo cual es equivalente a que, de 60 millones 900 mil personas económicamente activas, 32 millones 5 mil personas se encuentran en la informalidad de acuerdo con datos a febrero de este año. Asimismo, recordó que el mercado formal e informal influyen en el Producto Interno Bruto (PIB). El primero en un 75% y el segundo en 25%, según datos a 2022 de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) de INEGI.
“Cuando profundizas hay necesidad de preguntarse ¿Cuánta inversión requiere la formalidad para generar ese 75% de bienes y servicios comparado con lo que necesita el mercado informal para generar el 25%”, cuestionó. Finalmente, dijo que la actividad informal es más rudimentaria por lo que resultan más económicos los gastos en que incurre para su actividad productiva. Y es que se trata normalmente de negocios micros donde participan familiares y donde el dinero que se recibe suele dar vueltas. Así, los informales producen una cuarta parte del PIB, pero casi sin inversión por lo que se debe dar apoyo en aras de desarrollarlo y no verlo como una carga social absoluta, concluyó.
